Habitualmente
dejamos de lado la relajación para otro momento en el que tengamos más tiempo. Es cierto que a veces las técnicas de
relajación pueden parecer un poco tediosas y largas. Esto es porque no estamos
acostumbrados a frenar nuestro ritmo de vida y nos parece más importante
continuar con nuestra rutina a toda velocidad.
Nos
supone un esfuerzo de tiempo y de energía porque no hemos aprendido ninguna
técnica y, como todo lo que se aprende, lleva su tiempo hasta que se domina.
Para
aquellos que tienen la excusa de la falta de tiempo, aquí tienen la posibilidad
de intentar relajarse en sólo dos minutos.
¿Y
tú? ¿Serás capaz de no hacer nada durante dos minutos?